Como persona cuidadora, debes tener preparada una mochila de emergencia que los auxilie a ti y a la persona longeva, por lo menos las primeras 48 horas de una situación imprevista.
En otras circunstancias el equipo es individual, pero en tu caso deberás ver por ti y por la persona mayor. Platiquen y acuerden juntos qué debe contener. Recuerda que la idea de este objeto es que ante un fenómeno natural o situación de peligro, puedan desalojar su vivienda o incluso su comunidad de la forma más rápida posible y que cubra básicamente cuatro necesidades: aseo, alimentación, abrigo y comunicación.

Los objetos que debes incluir son:
Ropa: mudas limpias, ropa interior, frazada ligera o alguna prenda abrigadora y zapatos cómodos para ambos.
Kit de aseo personal: Cepillo y pasta de dientes, jabón, gel antibacterial, peine, pañales, toallas sanitarias, etcétera…
Medicinas y botiquín: Medicamentos para no interrumpir su tratamiento, cubrebocas, material de curación y equipo de monitoreo médico.
Agua y alimentos: Botellas de agua envasada y comida empaquetada o enlatada abre fácil y de tamaño individual. De preferencia incluye proteína o algo de la dieta que tenga permitida.
Radio: O algún equipo necesario con sus pilas, batería extra para el celular, linterna, cargadores, cables o extensiones y aparatos portátiles de comunicación y silbato.
Dinero: En efectivo y alguna tarjeta con una reserva o crédito de emergencia.
Documentos: Los que consideres importantes pueden ser en original y/o copia o guardados en una memoria. Contempla identificaciones, pólizas, escrituras, cartilla médica, fotografías de la familia y/o mascotas. La agenda de contactos de preferencia llévala en papel también.
Otros: anteojos y/o audífonos de repuesto, encededores o cerillos, copias de las llaves de casa y el auto. Bolsas de plástico, cuaderno y lápiz.

Más vale prevenir…
Revisa la vigencia y/o caducidad de los artículos cada seis meses y cámbialos o ajústalos de acuerdo a las condiciones del clima. Te sugerimos que busques una mochila que sea de material impermeable, de costuras anchas, con bolsas frontales y laterales. Y haz la prueba de que cuando la traigas puesta te permita mover libremente los brazos. ¡Ojalá no tengas que usarla pero, más vale tenerla preparada y a la mano!